Destiny 2: Black Armory, lanzado en 2018, es una expansión de contenido que añade al shooter en primera persona con elementos RPG mecánicas centradas en la recuperación de tecnología perdida. Los jugadores se enfocan en completar actividades de forja y enfrentamientos cooperativos para obtener armamento avanzado y equipo único. Esta entrega se distingue por introducir nuevas actividades de fin de juego diseñadas para equipos coordinados.